Control de roedores mediante utilización de raticidas de última generación, anticoagulantes, en formación de bloques y/o pellets de acuerdo a las circunstancias que se necesiten, con el objetivo de controlar eficazmente las poblaciones de ratas y ratones. Los raticidas se colocan estratégicamente en lugares que presenten condiciones favorables para la proliferación de roedores. En algunos lugares se instalan puntos de cebación, que consisten en colocar raticidas en el interior de trozos de tubos de PVC, debidamente rotulados con el propósito de evitar posibles accidentes por ingesta accidental.